domingo, 29 de septiembre de 2013

Jobs

Hoy me apetece escribir algo, pero no se me ocurre sobre qué.  Comenzaré contando que ayer vi la película "Jobs", esa que trata sobre parte de la vida profesional de Steve Jobs, el fundador de Apple. Me pareció una película entretenida en la que se pinta a Jobs como un tipo con unas ansias exageradas de hacer algo grande, no sé si con el  ánimo de facilitar la vida a la gente o con el de conseguir hacer algo grande por lo que ser recordado eternamente. Tal vez eran las dos cosas las que rondaban su cabeza.

En cualquier caso me quedó la sensación de que Jobs era una especie de ideólogo que técnicamente no aportaba nada. No sé si la realidad tendría algo que ver con lo que yo saqué en claro de la película, pero el Jobs que yo vi en la pantalla no me gustó. Era una persona simpática si sintonizabas con él, y tremendamente desagradable si pensaba que no lo hacías. Lo malo es que para sintonizar con él había que tener ganas de cambiar el mundo a toda costa y a cualquier precio. Parecía de esos que no entienden que alguien tenga prioridades en la vida ajenas al éxito profesional y a dejar una huella en la historia.

Insisto en que eso es lo que yo percibí de la película, pero tal vez la realidad de ese caballero fuese totalmente distinta a la que nos han mostrado en la película.
Todo esto me sirve para comentar la sensación que tengo de que, desde hace algún tiempo, se sobrevalora eso que se ha dado en llamar "la carrera profesional" y no se entiende a los que pensamos en el trabajo como un medio de ganarnos la vida y no como una meta absoluta de ella.

Yo no envidio a los a los CEO's, a los CIO's, a los presidentes, a los consejeros ni a los múltiples ejecutivos que ganan un montón de dinero a cambio de ceder todo tu tiempo a la causa de la empresa. Si eso es lo que quieren hacer y les gusta, me parece muy bien que lo hagan, pero me encantaría que comprendiesen que algunos de los que sacamos adelante, o intentamos hacerlo, sus proyectos e ideas, no tenemos su grado de compromiso porque no nos da la gana, porque no se nos paga para ello y porque, además, no hay hueco en la cúspide para que todos lleguemos a ocupar esos cargos que tanto adornan al ponerlos en las tarjetas de visita aunque casi nadie entiende en qué consisten.

4 comentarios:

Pantuflo Zapatilla dijo...

Te nombraría en el acto CIO : Cateto Ignorante y Obtuso. Llevarías un manto de armiño confeccionado por niños paquistaníes sobre-explotados de una subcontrata de tu empresa y el resto de empleados se inclinarían a tu paso para evitar tu mirada y el hedor de tus axilas.

Tu actitud vital desprende un tufillo sindicalista comparable a la hediondez de tus susodichas axilas. En el próximo 1 de Mayo acuérdate no portar la pancarta, ya que provocaría desmayos en tus compañeros rogelios.

Te considero claro candidato para acompañar a Nicolás Maduro en sus próximas aventuras.

Meteorismo galáctico dijo...

Sé quién se esconde tras el insigne nombre de Don Pantuflo Zapatilla, y también sé que eres un explotador, de ti mismo, pero explotador.

Cuando la "Revolusión Bolivariana" se imponga en España, tendrás que vestir camisa roja como el resto de los ciudadanos y ciudadanas y deponer tu actitud ofensiva para con los activistas de ese gran movimiento de liberación de la opresión capitalista.

Zarzamora dijo...

¿Quién será Pantuflo Zapatilla? Desde luego, na baja de los 45 años. Están ya tan lejanos los tebeos de Pulgarcito...Te felicito por tu comentario, por lo que cuentas al hilo de la película, porque la peli no la he visto.

Anónimo dijo...

Grandioso "pos" sobre el apasionante mundo del paripé laboral..
Esto me recuerda un "proyezto" en el que estuvimos Meteorismo y yo y donde había un "chiste" asaz "divertido" que consistía en si te ibas a casa antes de las 9 de la noche te decían "¿Qué,te tomas la tarde libre?"..Juas,juas,juas,que chispa..