domingo, 27 de abril de 2008

Otra maratón más para mi "palmarés"

Hoy he corrido mi decimoquinta Maratón Popular de Madrid y, como soy un presuntuoso, os lo cuento para que me digáis que soy un tío duro y, si os place, también podréis decir que mi estulticia llega a límites difícilmente superables.

Como es habitual en estas carreras en las que yo no tengo ni la más remota posibilidad de ganar, uno se limita a correr lo más rápido que pueda para llegar lo antes posible, pero hay que tener en cuenta que si uno va más veloz de lo debido, al final sufrirá también más de la cuenta y, claro, a nadie le gusta sufrir pudiendo evitarlo (a casi nadie, que la necedad es libre).

Esta mañana me he levantado a las 6:15 para desayunar Nocilla porque es una sustancia maravillosa. Aporta gran energía y, como es pegajosa, no se queda flotando por el tubo digestivo y así me ahorro las vomitonas que estas largas carreras suelen acarrearme (salvo hoy, que me he librado). Tras el desayuno tocaba sentarse en el excusado para aligerar todo el lastre innecesario. Esta tarea he tenido que llevarla a cabo un par de veces pero, a pesar de todo, cuando estaba en el Paseo de Recoletos (zona de salida del evento deportivo) he sentido nuevamente la llamada de la naturaleza y, gracias a que mi amigo Javi (otro corredor) ha sido previsor y llevaba Kleenex, he podido utilizar uno de los retretes portátiles de la organización para liberarme de los últimos residuos que amenazaban con escaparse sin permiso en el primer repecho de la carrera que me hubiese obligado a emplear mis fuerzas en el ascenso en lugar de en la contracción del esfínter anal (soy un marrano, lo sé).

La carrera ha comenzado puntual tras el ya habitual espectáculo de la llegada de los paracaidistas del Ejército de España (o del Estado Español o como quiera llamársele) con sus parapentes a la línea de salida. Hemos comenzado los tres amigos juntos manteniendo un paso tranquilito (hay que reservar fuerzas porque, al final, siempre faltan) y, poco a poco nos hemos ido separando (es mejor que cada cual vaya a su ritmo). Los kilómetros iniciales han ido pasando con rapidez porque hacía muy buen tiempo y, además, había mucha cuesta abajo (suavecita), pero al final han llegado los kilómetros malos. Además de ser los últimos, eran cuesta arriba en su gran mayoría. Las fuerzas flaqueaban y las ganas de parar aumentaban. Menos mal que, en esta ocasión, mi cansancio y mi hartazgo no han sido tan inmensos como en otras ocasiones, y he podido culminar la cuesta arriba que desembocaba en el Parque del Retiro con bastante dignidad y sin parar de trotar.

La entrada al Retiro ha sido, como siempre y, como diría el difunto Joaquín Luqui, ¡Total, alucinante, lo más! La gente aplaudía y gritaba. No sé lo que decían ni si alguien se dirigía a este calvo corredor que llevaba la cabeza y la cara cubiertas del salitre del sudor reseco que las tres horas y quince minutos de carrera habían generado, pero la cercanía de la meta y el bullicio del gentío, han conseguido insuflarme las fuerzas que necesitaba para poder acelerar el paso (Fernando Alonso se reiría de mi aceleración, pero no me importa porque llevo torta) y llegar a la meta para poder hacer lo que más deseaba: Pararme y tumbarme en cualquier sitio para descansar.

Cuando he recogido las diversas vituallas que nos han dado y he recuperado mi bolsa del ropero (una tienda de campaña militar), me he tirado en el primer sitio que he visto libre: En medio de un camino asfaltado. Más de uno se ha acercado a mí para preguntarme si estaba bien. Supongo que mi estética cadavérica y mi inmovilidad total habrán hecho pensar a esos buenos samaritanos que mi salud estaba muy deteriorada o, sencillamente, que ya no tenía ni salud ni vida. Yo, cortésmente les he respondido que estaba bien, que no había nada de lo que preocuparse.

Finalmente me he reunido con uno de mis amigos corredores (al otro le hemos perdido la pista) y su simpática esposa nos ha llevado a casita donde ahora estoy contando mis peripecias para pasar el rato.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Hemos seguido Lady H y yo la carrera por la tele, pero no te hemos visto, de todas maneras, te damos la enhorabuena por ese "ésito" conseguido y por haber entrado en loor-y en olor, porque todos sabemos que tu esfínter se relaja aún más si cabe en las carreras..-de multitudes.
De todas formas, "esijo" que en la siguiente maratón bajes de las 3 horas, no toleraré insolencias ni subidas de tono..
Yo ayer hice Tai-Chi en el Retiro, mi estampa era realmente hilarante..

Anónimo dijo...

Pues yo sí te he visto. Si eres lo suficientemente tonto como para pedirle a alguien también lo suficientemente tonto que haya grabado la carrera, podrás comprobar que durante 5-10 segundos tu estulta imagen aparece en pantalla de forma nítida.

Enhorabuena por tu "ésito" nuevamente.

Meteorismo galáctico dijo...

Efectivamente, Blackpuddingandpoo (tus nombres son un alarde de ingenio y estulticia y eso te delata), mi hermano también ha visto en la tele mi esbelta figura tocada con una camiseta de color amarillo chillón mientras pasaba veloz por la Puerta del Sol.

Es una pena que Antares no haya podido gozar de ese momento de gloria.

Por cierto, Antares, tus "esigencias" me las paso por el mismo sitio por el que me he pasado los Kleenex de mi amiguito esta mañana, pero aún así intentaré rebajar mi marca hasta las tres horas. El día que lo consiga llamaré a ZP para compartir con él mi gozo.

Anónimo dijo...

Yo también ví esas imagenes del maratón por tv , pero no sabría reconocerte.
Eso de correr y sufrir durante tantas horas , es dificíl de entender por la gente que no practicamos ese deporte. Imagino que es un reto personal para vosotros, y se nota que el esfuerzo de ayer y de días anteriores entrenando , te ha compensado y así que...Felicidades meteorismo.

Jajaja dijo...

Este ha sido un fin de semana deportivo. Tu maratón, el Tai-Chi de Antares, la rotura del motor de Alonso (si comiera fabada, el muy patán, podría haber llegado a boxes a base de propulsión a cuesco), dos chicas cuyo nombre no recuerdo que han clasificado a España para la final de la Copa Federación... Dorami y yo, por nuestra parte, por fin hemos comprado la Wii. Ayer, con un despliegue de energías sin precedente, conseguí bajar mi edad física a los 57 años.

Anónimo dijo...

Meteorismo,

Eres todo un atleta... Enhorabuena.

Yo por ahora no puedo plantearme correr ninguna, como demasiados torreznos y polvorones xDD

Anónimo dijo...

Estimado Meteorismo.

Quisiera ante todo, darte la enhorabuena por este nuevo éxito, que a buen seguro habrás dedicado a la necedad y el progreso.

Aquí en la Seguridad Social, al conocer la noticia, todos nos hemos emocionado y hemos decidido, en homenaje a tu hazaña, celebrar desayunos de tres horas y quince minutos durante toda esta semana.

Bueno, a decir verdad, no todos ha compartido nuestra dicha, ya que un pequeño grupo crítico ha quitado méritos a la gesta afirmando no entenderla ya que no estabas embarazado.

Para acallar estos comentarios desde aquí te “esijimos” que el año que viene participes embarazado de 8 meses, aunque eso implique un empeoramiento de tu marca, así es que ya sabes campeón: A salir por Chueca que solo tienes cuatro meses para lograr que un hombretón te fecunde.

Un saludo, compañero bolivariano.

Anónimo dijo...

En tierras norteñas no se ven las maratones de la capital, si alguno la dejase por youtube....

saludos a tod@s!!

Jajaja dijo...

¡¡¡EXTRA!!!
¡¡¡EXTRA!!!
¡¡¡EXTRA!!!

Como reportero de actualidad de Libertad Diodenal tengo que informaros del último paso del gran actor Andrés Pajares hacia el Olimpo de los inmortales del cine. Ha sido detenido por amenazar a los empleados de un bufete de abogados con una pistola simulada. Podéis ver la noticia en la Estrella Digital.

Ya solo le falta participar en orgías con gente de la política y las finanzas y morir de forma que suscite sospechas.

Kupe Karras dijo...

Lo que hubiese dado yo por ver tu tremendo esfuerzo por la televisión. Enhorabuena,Meteorismo, los maratones son de valientes, y promomueven la vida sana. Yo desgraciadamente, con andar ya me vale, aunque de niña hice karate tres veces por semana durante muchos años (por eso mi flexibilidad, aguante y reflejos ninja cuando se tercia). Espero que alguien suba el video para poder emocianarme con tu llegada a meta.